Es bien sabido que dentro de las muchas razones por las que un empleado puede presentar problemas dentro de su ambiente profesional se encuentra el estrés laboral. Ya sea causado por situaciones dentro o regularmente fuera de su alcance, a este se le añade otro factor de gran relevancia dentro del entorno laboral: el riesgo psicosocial.
En esta nueva entrada del #blogWorkbeat abordaremos cómo esta conducta puede ‘chocar’ con la productividad, repercutiendo directamente en los niveles de desempeño del colaborador e impactar su desarrollo profesional.
¿Cómo podemos definir el riesgo psicosocial laboral?
Según la OMS, se puede definir al riesgo psicosocial como todas aquellas condiciones presentes en una situación de trabajo que pueden llegar a afectar el bienestar y la salud de los empleados.
Estos se pueden derivar de las deficiencias en el diseño, la organización y la gestión del trabajo, así como de un escaso contexto social del trabajo, y pueden desembocar en resultados psicológicos, físicos y sociales negativos, como el estrés laboral, el agotamiento o la depresión. Algunos ejemplos de condiciones de trabajo que pueden provocar riesgos psicosociales en los colaboradores son:
- Cargas de trabajo excesivas.
- Exigencias contradictorias y falta de claridad de las funciones del puesto que desempeñan.
- Falta de participación en la toma de decisiones que afectan al trabajador y falta de influencia en los procesos del trabajo.
- Gestión deficiente de los cambios organizacionales, provocando inseguridad en el empleo.
- Comunicación ineficaz y falta de apoyo por parte de la dirección o los compañeros.
- Acoso o mobbing laboral ejercido por terceros.
Los trabajadores suelen sentirse estresados cuando las exigencias de su trabajo son mayores que su capacidad para resolverlas. Además de los problemas de salud mental ya conocidos como el Burnout, los trabajadores sometidos a periodos de estrés prolongados pueden desarrollar problemas graves de salud física.
Por otro lado, para las organizaciones los efectos negativos se traducen en:
- Mal rendimiento general de la empresa, aumento del absentismo, presentismo (trabajadores que acuden trabajar cuando están enfermos, pero son incapaces de rendir con eficacia) y unos mayores índices de accidentes y lesiones.
- Bajas prolongadas derivadas de otras causas, y estrés relacionado con el trabajo que puede contribuir a un aumento de los índices de jubilación anticipada.
La NOM-035 y su apoyo en la reducción de los riesgos psicosociales
Teniendo en cuenta lo expuesto anteriormente, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social ha establecido la Norma Oficial Mexicana 035, mejor conocida como la NOM-035, siendo su propósito esencial identificar, analizar y prevenir factores de riesgo psicosocial en las empresas. Por otro lado, también busca crear un ambiente laboral favorable para que todos los trabajadores sin excepción se desarrollen de forma competente a nivel personal y profesional.
Esta norma se puede aplicar en tres niveles distintos:
- Centros de trabajo de no más de 15 trabajadores
- Empresas que tengan entre 16 y 50 empleados
- Compañías de más de 50 personas
Es por esto que es responsabilidad de cada empresa poder identificar en qué nivel se encuentra y cumplir con la normatividad que le corresponde. Los requisitos generales que abarca esta ley son:
- Medidas de prevención
- Identificación de los trabajadores expuestos a acontecimientos traumáticos
- Difusión de la información
- Identificación y análisis de factores de riesgo psicosocial
- Evaluación del medio ambiente laboral
- Medidas y acciones de control
- Ejecución de exámenes médicos
El no cumplir con el apego a esta normativa se puede llegar a castigar, según la Ley Federal del Trabajo, con multas económicas de entre 26 mil y hasta 600 mil pesos.
¿Es posible prevenir el riesgo psicosocial?
El temor de que nuestro equipo se encuentre en riesgo de comprometer su bienestar mental, emocional y laboral es palpable dentro de cualquier compañía, pero hoy, afortunadamente la respuesta es sí: el riesgo psicosocial se puede prevenir.
Al haber identificado estos riesgos, el porqué de su surgimiento y cómo evaluarlos, llegamos a las acciones y herramientas de prevención que se encuentran a nuestro alcance. Una empresa prevenida puede ofrecer mejores condiciones a quienes trabajen en ella al implementar estrategias de prevención de riesgos; comienza con los siguientes puntos:
Identifica los factores de riesgo psicosocial de tu empresa
Para evitar que sucedan, primero tienes que identificar cuáles son los riesgos a los que el equipo se puede ver expuesto dentro de la compañía. Para ello, deberás encontrar los peligros potenciales a miras de conservar la salud emocional y física de tus empleados.
Otro método que puedes utilizar para identificar situaciones de riesgo es la aplicación de pruebas y encuestas personalizadas para tus empleados. De esta forma podrás conocer cuáles son las particularidades de cada uno de los miembros de tu plantilla.
Crea un plan de prevención de riesgo psicosocial
Una vez que hayas identificado los riesgos, te será más fácil crear tu plan de prevención. Recuerda que es necesario elaborarlo de acuerdo a las necesidades de cada área de tu empresa; para saber cómo es la comunicación entre integrantes y las responsabilidades de cada persona puedes apoyarte del organigrama empresarial.
Dentro del plan será de gran ayuda contemplar canales que permitan al equipo compartir sus experiencias ante cualquier situación de violencia o injusticia, tal y como los buzones de quejas y sugerencias y chats.
De igual manera, será necesario evaluar la posibilidad de contar con un especialista en salud emocional dentro de la organización para que pueda asesorar de manera más informada y cercana a quienes presenten problemas que puedan desembocar en este riesgo tan particular.
Evalúa y actualiza tu estrategia de prevención
Por último, aunque cuentes con un plan de prevención, es importante recordar que si no lo evalúas no podrás saber si realmente funciona; de igual forma, si no actualizas las estrategias de tu plan podrías dejar fuera nuevos riesgos que dañen a tus trabajadores.
Crea un hábito de revisión y una política de evaluación dentro de tu empresa utilizando Evaluaciones de desempeño o encuestas de Clima Laboral, así como entrevistas personalizadas con colaboradores clave dentro de los procesos de la compañía para conocer de primera mano la manera en la que están viviendo estas estrategias, y su opinión sobre cómo se pueden mejorar.
Un entorno de trabajo en el que se respalda al empleado lo motiva a desempeñar sus labores lo mejor posible, desembocando en un entorno psicosocial favorable que fomentará el buen rendimiento y el desarrollo personal, así como su bienestar mental y físico. No dejes de lado las herramientas que pueden ayudarte con experiencias maravillosas desde el inicio de su vida laboral en tu compañía.