Dentro de las múltiples aristas que sustentan a una empresa, la cultura organizacional goza de un protagonismo principal, pues es gracias a ella que se cuenta con un vehículo sólido para lograr mejorar relaciones, procesos y proyectos.
Es por esto que dentro de este mismo concepto podemos encontrar otro, que es el que una compañía cuente con resiliencia organizativa, pero ¿a qué nos referimos con esto? Continúa leyendo esta nueva entrada del #blogWorkbeat para identificarla y saber si cuentas con ella en tu empresa.
Así se identifica una organización resiliente
Durante los últimos años se ha hablado del dinamismo en el que la sociedad se ha visto envuelto, impulsada, claro, por múltiples factores como la adopción de la tecnología, el crecimiento de las civilizaciones y el avance en nuevas mejoras para la humanidad.
De ahí que el trabajo sea un reflejo exacto de los cambios que hemos vivido en la sociedad, pues este ha vivido también una transformación acelerada que, hasta hace algunos años, veíamos de forma lejana, llevándonos al concepto de adaptación.
Así pues, podemos comenzar a definir a la resiliencia organizacional como toda aquella capacidad que posee una organización para anticipar, prepararse, responder y adaptarse a cambios y disrupciones repentinas para sobrevivir y, por sobre todas las cosas, prosperar.
Es por esto que, para las nuevas generaciones, una organización resiliente no es solamente aquella que se puede mantener activa a largo plazo, sino que también permanece rentable a pesar de cualquier circunstancia.
Este concepto vino a reforzarse más desde el inicio de la pandemia de COVID-19, donde la resiliencia organizacional fue un factor indispensable para que las empresas pudieran mantener activas sus operaciones, buscando nuevos métodos y formas de trabajo para eficientar sus procesos de manera continua.
Uno de estos enfoques fue la adaptación a la digitalización, pues gracias a esta migración se demostró que todas aquellas compañías capaces de adaptarse a nuevas modalidades de trabajo podían enfilarse a superar el desafío que suponía un cero contacto físico, al mismo tiempo que se demostraba que la productividad podía tener presencia en diferentes lugares y husos horarios.
Debido a esto, la importancia de que una compañía cuente con resiliencia organizacional recae en que, al momento de trazar una planeación estratégica, se deben considerar diversas situaciones, tales como:
- Cambios rápidos y multifacéticos, pues las empresas son afectadas por cambios en su contexto social y político de manera continua.
- Cambios ambientales, gracias a que el calentamiento global y la destrucción de los ecosistemas se han convertido durante los últimos años en una potencial amenaza para diversos sectores donde se busca evitar la explotación natural.
- Evolución sin precedente en las tecnologías de la información, lo que lleva a buscar por parte de los líderes de RH y directivos nuevos caminos para adaptarse de manera eficiente a la digitalización.
Es de esta manera que toda aquella organización resiliente podrá obtener beneficios 100% tangibles a corto, mediano y largo plazo, entre los que podemos encontrar:
- Adaptabilidad estratégica: es aquella que brinda la capacidad de gestionar con éxito las distintas circunstancias que se puedan presentar, incluso si esto significa modificar nuestra presencia en la industria core.
- Liderazgo ágil: permite asumir riesgos que han sido valorados previamente con seguridad y responder rápida y adecuadamente a una oportunidad o a una amenaza en cualquier momento que estas lleguen a presentarse.
- Operación sólida: demostrando una buena gestión empresarial a través de las estructuras de la organización, siempre basada en una cultura de confianza, transparencia e innovación, llevará a una garantía de fidelización hacia la misión, visión y valores de la empresa, cimientos fundamentales para cualquier compañía y colaborador.
Asimismo, los expertos identifican a 3 elementos clave dentro de la resiliencia organizacional, impulsados por 3 ámbitos que llevarán el potencial de la organización y sus colaboradores al siguiente nivel:
Excelencia del producto – Resiliencia operacional
Fiabilidad del proceso – Resiliencia en la cadena de suministro
Conducta de las personas – Resiliencia de la información
¡Impulsa la resiliencia organizativa!
Estamos seguros que, después de leer los últimos párrafos te estás preguntando si la resiliencia es una característica predominante en tu organización.
En entradas anteriores del Blog Workbeat hemos abordado la importancia de la cultura organizacional para el éxito empresa, por ello el que esta cultura, además de sólida y constante sea resiliente, podrá ayudarte a que tu organización y su activo más importante (sus colaboradores) alcancen su mejor versión.
¡Así puedes impulsar una resiliencia organizativa!
1. Toma acciones respecto a la resiliencia organizacional
Un punto clave para desarrollar una exitosa resiliencia organizacional es hacer de la capacidad de recuperación y adaptación sea percibido como algo innato en la empresa.
Por ello, algo que puede ayudarte en este punto es actualizar las políticas organizacionales, donde se proponga, por medio de la incorporación de nuevas políticas resilientes, transformar los métodos tradicionales en algo más dinámico, organizado y profundamente arraigado en las actuaciones diarias de la organización.
2. Planifica y visualiza diferentes escenarios
Si bien es una realidad que no todas las compañías cuentan con las herramientas para predecir todos los factores que pueden llegar a ser una amenaza o una oportunidad, el llevar a cabo los procesos de una manera estratégica y preventiva puede ayudar a fomentar la identificación y explotación de oportunidades emergentes.
Para lograr esto, específicamente desde las trincheras de RH, se pueden tener en cuenta los siguientes puntos:
- Evaluaciones de desempeño y diagnóstico
- Indicadores y KPI’s de semestres o años anteriores vs el actual
- Auditorías de RH
Esta triada puede ser un excelente inicio para identificar tendencias y lograr observar aquellos patrones que se repiten por industria y temporalidad, lo que ayudará a la compañía a prevenir escenarios que puedan entorpecer la prosperidad.
3. ¡Mejora el networking!
A pesar de que lo que se pueda llegar a pensar, ninguna compañía puede funcionar de manera aislada.
Es por esto que los vínculos profesionales son el mejor vehículo para aumentar la resiliencia organizativa en equipo, pues en su reforzamiento podemos encontrar adaptabilidad, flexibilidad y cooperación para la correcta culminación de proyectos.
Así pues, en este punto tenemos dos grandes cartas para jugar a nuestro favor:
-La comunicación interna, por medio de la cual podemos hacer sentir al colaborador parte de todo lo que sucede en nuestra organización, independientemente del lugar donde se encuentre.
-La evaluación del clima laboral, que nos permitirá identificar con facilidad aquellos lazos que se pueden reforzar entre empleados y departamentos, así como a tomar acciones para fidelizar al talento de una manera más orgánica.
De esta forma, los vínculos laborales pueden funcionar como una antena receptora ante los cambios emergentes importantes en el ambiente, una vez que han sido tomados en cuenta a nivel interno para establecer las respuestas adecuadas.
- Recluta y gestiona de forma eficiente
Por otro lado, el principal hecho de la resiliencia organizacional es que se trata de estar preparados para actuar. Es por esto que el reclutamiento y la selección de personal se debe llevar a cabo de manera eficiente, pues esto significará contar con nuevos vínculos estratégicos y profesionales talentosos incorporados a nuestra plantilla.
De igual forma, contar con una correcta gestión de información para que el colaborador, una vez que ha finalizado el proceso, se sienta integrado de forma correcta a la compañía es esencial.
¿Qué tal contar con un expediente del empleado 100% centralizado y disponible en la nube, o facilidades como tener recibos de nómina y documentos firmados de manera electrónica? Esto será el parteaguas de una realidad más dinámica, segura y efectiva, llena de experiencias automágicas que facilitarán el día a día.
Sabemos que pensar en cambios y, más que nada, adaptarnos a ellos nunca ha sido fácil, sin embargo, es un paso indispensable para lograr pasar de la supervivencia a la prosperidad laboral por medio de la resiliencia organizativa. Continúa navegando por el Blog del Cuidado al empleado para conocer más temas de interés, y descubre con nosotros cómo iniciar la revolución desde Recursos Humanos.
