Lamentablemente, el fenómeno del bajo rendimiento laboral es más usual de lo que crees en las organizaciones. Se denomina como bajo rendimiento laboral a la falta de producción o de producción ineficiente. Esto incluye cualquier actividad laboral que no cumpla con los estándares establecidos por la empresa. Esto puede incluir una falta de cumplimiento de los plazos establecidos, una mala calidad de trabajo, trabajar a un ritmo más lento de lo estimado. También puede significar el no seguimiento de las instrucciones, la falta de compromiso con el trabajo o la falta de motivación en el colaborador.
Lo más delicado de este tema es que el bajo rendimiento se contagia, y los trabajadores en esta situación provocan que se reduzca la satisfacción y la productividad en el resto de la fuerza laboral. Y, por si fuera poco, este fenómeno afecta aún más a la experiencia de los clientes, y directamente y de forma negativa, a la reputación de la compañía.
Entonces, si en tu organización están pasando por algo similar, es momento de encender las alarmas y actuar rápido. En este blog te compartiremos la información más relevante de este “padecimiento” en los colaboradores y por supuesto, algunos consejos para sobrellevarlo de la mejor manera desde la trinchera de recursos humanos.
¿Cómo detectar el bajo rendimiento laboral?
La clave está en medir la productividad laboral con evaluaciones que se ajusten a las necesidades de tu organización y de la operación de cada puesto.
Entre las más populares se encuentran las siguientes:
Evaluación por objetivos
En este método de evaluación de trabajadores, hay una serie de objetivos laborales que son delegados a cada trabajador. Cada uno tiene una métrica, valor y fecha límite para ser cumplido.
En este periodo de tiempo los trabajadores deben de trabajar sobre el objetivo y estar listos para la fecha de entrega para recibir la retroalimentación y calificación por parte de su evaluador (que en la mayoría de los casos se trata de su jefe directo).
Evaluación 360°
Con el fin de tener resultados más certeros en este tipo de evaluación, se recomienda que el colaborador tenga por lo menos 3 meses en la compañía, esto debido a que los evaluadores son:
- El supervisor directo
- Compañeros al mismo nivel jerárquico (al menos dos)
- Los subalternos o empleados a su cargo (al menos dos)
- Clientes que han tratado directamente con el trabajador evaluado
- El propio trabajador evaluado (autoevaluación)
Por lo tanto, deben de tener un periodo de convivencia no menor a 3 meses con el evaluado para brindar una calificación con fundamentos suficientes.
Con la evaluación 360° se obtiene información muy interesante ya que, podemos comparar el rendimiento de un empleado con el de sus compañeros.
Te recomendamos aplicarla cuando hay varios puestos similares, pues permitirá conocer a detalle el desempeño laboral de cada trabajador e identificar al más sobresaliente. Por otra parte, también es posible comparar el rendimiento con el de evaluaciones anteriores del mismo empleado. ¿Ha mejorado su productividad laboral? ¿Cómo han influido los cambios en la forma de trabajar?
Primeras señales de alarma ¡abre bien los ojos!
Detectar una baja en el desempeño tan pronto como surge, o incluso anticiparse a él, da más oportunidades para resolver la situación.
A continuación, te presentamos las primeras señales de alarma que pueden surgir en el comportamiento de los trabajadores con un bajo rendimiento laboral:
- Tarda más de lo normal en responder correos electrónicos
- Llega tarde al trabajo
- Tarda más de lo habitual en realizar una tarea
- No participa en proyectos de equipo
Ideas para incrementar la productividad laboral en tu empresa
- Asegúrate de que todos sepan sus funciones
Algo fundamental es que los trabajadores conozcan bien su papel en la compañía, para ello te recomendamos invitarlo a consultar la descripción de puesto y sus objetivos laborales a través de la app de recursos humanos.
- Proporciona feedback continuamente
Consulta los avances y evidencias que el trabajador tiene en cada uno de sus objetivos para brindar una retroalimentación que lo ayude a mejorar en las áreas necesarias. Y ¿por qué no? Pregúntales cómo les gustaría mejorar, qué habilidades laborales les gustaría aprender y qué les gustaría cambiar.
Muchas veces, un bajo rendimiento laboral puede estar vinculado con una falta de motivación o incluso una falta de reconocimiento.
- Escucha su opinión
Pregúntale acerca de su situación y forma de trabajo, tal vez en sus comentarios encuentres brechas en los procesos que no han visto y se puedan mejorar.
Esto es lo que se llama una cultura de puertas abiertas. Un ambiente en el que los empleados se sienten cómodos hablando de sus problemas, en lugar de ocultarlos; de esta forma es posible ayudarles a gestionar los problemas, así además de elevar el desempeño laboral los colaboradores estarán más satisfechos con la organización.
- Establece esquemas de reconocimiento laboral
Recompensar la productividad y la dedicación en el trabajo es una de las tácticas más poderosas de compromiso y retención de los empleados.
Te invitamos a leer el siguiente artículo en donde te contamos a detalle cuales son las consecuencias de la falta de reconocimiento laboral y cuál es la mejor forma de empezar a implementarlo en tu plantilla.
En conclusión, la mayoría de las empresas, independientemente de su tamaño o industria, se enfrentan al problema del bajo rendimiento laboral, ya que como mencionamos al inicio este es un fenómeno que fácilmente se extiende por la plantilla.
La forma en que abordan este problema será lo que determine su éxito en el futuro, por ello te recomendamos implementar todas las ideas de gestión del bajo rendimiento que te compartimos en este artículo. Seguramente te serán de mucha utilidad y te permitirán salir delante de esta emergencia en el desempeño laboral.